| Impugnan a dos jueces por coportamiento discriminatorio hacia las mujeres | | |
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El juez de la Corte de Chubut que descalificó a las mujeres para desempeñarse en el máximo tribunal de la provincia enfrenta un pedido de juicio político por sus declaraciones sexistas. Referentes de organizaciones políticas y de mujeres presentaron una denuncia contra el vocal de la Sala Civil del Superior Tribunal de Justicia, Miguel Ángel Donnet, por “desconocimiento inexcusable del derecho y mal desempeño de sus funciones”, con el acompañamiento de sindicatos, entidades de abogados, institutos académicos, organizaciones de derechos humanos y feministas. Mientras tanto, en Santa Fe, la candidatura a camarista penal de un juez fue impugnada por una ong de Rosario especializada en derechos humanos de las mujeres por haber firmado una sentencia discriminatoria y cargada de estereotipos de género con la que absolvió a un acusado de abuso sexual contra sus hijas –a las que embarazó y obligó a abortar–, por la cual el Estado provincial debe reparar a la víctima que lo denunció e implementar medidas para que no se repitan situaciones semejantes (ver aparte).
“Consideramos gravísimo que un vocal de la más alta magistratura de la provincia reproduzca estereotipos de género que entrañan discriminaciones incompatibles con el derecho internacional de derechos humanos. Sus manifestaciones muestran una idea discriminatoria hacia las mujeres al considerar a las mujeres responsables de las tareas domésticas y de crianza y que se encuentran menos preparadas para ejercer el cargo que él ocupa”, dice el pedido de jury elevado al presidente de la Legislatura provincial, Mariano Arcioni.
Los dichos del juez de la corte provincial “no solo refuerzan los estereotipos al reducir su responsabilidad principal al papel de madres o amas de casa, que nuestra Constitución pretende erradicar sino que además sus expresiones muestran una idea de superioridad de los varones sobre las mujeres al cuestionar la idoneidad de las mujeres para ejercer sus cargos en igualdad de oportunidades”, detalla el escrito, al que tuvo acceso este diario. La presentación incluye abundantes fundamentos jurídicos y del derecho internacional de los derechos humanos. Entre otros argumentos, se sostiene que incurrió en ejercer violencia simbólica contra las mujeres.
La remoción de Donnet es promovida por Mirta Iglesias, del Comité de América Latina y el Caribe para la Defensa de los Derechos de la Mujer (Cladem) Paula Useglio, de la Cátedra Abierta de Sexualidad, Género y Derechos Humanos de la Universidad Nacional de la Patagonia San Juan Bosco, y Alejandra Tolosa, del Frente de Mujeres del partido Unidos y Organizados para la Victoria, de Puerto Madryn.
“El pedido de juicio político más la cantidad de adhesiones que lo acompañan de distintos espacios a nivel local, nacional y regional, evidencia que la ciudadanía no está dispuesta a retroceder en los derechos conquistados en los últimos años. Entendemos que como sociedad civil estamos haciendo nuestra parte, esto es, exigir nuestros derechos a través de los mecanismos previstos y de acuerdo a la normativa nacional e internacional vigente. Los poderes públicos deben cumplir con su parte: por un lado, la de representar y escuchar las demandas de la ciudadanía, y por el otro, asumir las responsabilidades que les compete como parte del Estado. En este marco y de acuerdo a la Constitución de la provincia, deberían destituir al ministro Donnet por la causal de inhabilidad para el cargo por desconocimiento inexcusable del derecho”, señaló la abogada Tolosa a Página/12.
¿Qué dijo Donnet? En junio, el día que asumió su nuevo cargo respondió preguntas de la prensa local. En cuanto a las chances de que una mujer se integre a la corte provincial, se quejó de los cupos. “No es porque esté en contra de la mujer sino porque el cupo limita. Se los dije a las diputadas en Legislatura: `¿Quieren cupo de una? Se lo firmo ya, pero dos no´. No les conviene el cupo. La participación de la mujer oxigena mucho pero se debe preparar”. Igual aclaró: “Si hay una vacante no tengo ningún problema que venga una mujer, al contrario”. Frente a la pregunta de “si hay mujeres en condiciones de llegar a ese cargo”, Donnet afirmó: “Sí, lo que pasa es que la mujer no deja de ser mujer y tiene las responsabilidades de la casa, hijos, estudio. Se le hace mucho más difícil… me la está haciendo más difícil mi mujer para que yo pueda venir acá, se imagina una mujer abogada… pero hay muy buenas abogadas”. También hizo declaraciones estigmatizantes de los jóvenes. “Un hijo estudia, un día viene con pelo cambiado y al otro día ya algo le está pasando y es un riesgo permanente. Nos crea más preocupación si un hijo se va de la casa, perdés el control y deberíamos trabajar juntos municipio, provincia y Nación en una lucha para que se frene primero en la frontera, que no entren más los que vienen de afuera a vendernos esta porquería”, en referencia a las drogas ilícitas.
Las declaraciones del magistrado generaron repudios y críticas desde diferentes sectores a nivel provincial y nacional.
El pedido de jury fue acompañado por numerosas adhesiones, entre otras, del Colegio Público de Abogados de Puerto Madryn, el Sindicato de Trabajadores Judiciales del Chubut, la Asociación de Magistrados de Chubut, Amnistía Internacional, la ex presidenta de la Asociación de Abogados de Buenos Aires, María Elena Barbagelata.
En la presentación se ofreció para que brinden declaración testimonial a la jueza Susana Medina, recién elegida titular de la Asociación Internacional de Mujeres Jueces y la abogada Susana Chiarotti, del Comité de Expertas de la Convención de Belém do Pará.
Críticas a un fallo
La candidatura a camarista penal de un magistrado santafesino fue impugnada por una organización especializada en derechos humanos de las mujeres de Rosario, por haber absuelto a un hombre acusado de abusar sexualmente de cuatro de sus hijas durante varios años. Las víctimas no sólo sufrieron el vejamen sino también, en uno de los casos, embarazos y abortos forzados. Pero en un fallo sexista, el juez de Sentencia de los tribunales de Vera, Nicolás Muse Chemes (foto), falló a favor del acusado.
El Poder Ejecutivo de Santa Fe envió el pliego de Muse Chemes a la Legislatura provincial junto al de otros nueve candidatos propuestos para ocupar distintas vacantes en la Justicia. La Asamblea Legislativa está convocada para el 6 de octubre para tratar los pliegos.
La ONG cuestionó duramente el fallo de Muse Chemes: evidencia estereotipos discriminatorios por razones de género (como que las mujeres son fabuladoras que inventan el abuso para escapar al control paterno) así como mitos sobre los perpetradores de casos de violencia de género que fueron desterrados hace años por los especialistas del tema. Uno de ellos, esgrimidos por la defensa, es que los abusadores son enfermos. La denuncia la había realizado en 2011 una de las hijas, identificada por las siglas C.E.R.
Insgenar y el Comité de América Latina y el Caribe para la Defensa de los Derechos de la Mujer (Cladem) denunciaron el caso ante el Comité para la Eliminación de todas las Formas de Discriminación contra la Mujer de las Naciones Unidas (Cedaw), que admitió el caso.
Finalmente, el Ejecutivo provincial dictó un decreto por el cual se aprueba el “Acta de Compromiso de Solución Amistosa” entre las autoridades de la provincia y las peticionarias.
En la impugnación, la presidenta y vicepresidenta de Insgenar, Susana Chiarotti y Viviana Della Siega, señalan que las reparaciones “significan un costo considerable para la provincia de Santa Fe por lo que resulta insensato que a un juez que ha sido responsable de generar semejantes costos, además de la exposición a la vergüenza internacional por emitir una sentencia discriminatoria, se lo premie con un nombramiento para juez de cámara”.
C.E.R. tenía 19 años cuando denunció a su padre por abuso sexual incestuoso en Reconquista. La chica, hoy de 23 años, recurrió primero a la Defensoría del Pueblo en su ciudad, pero no obtuvo respuesta. Quedó sola y sin patrocinio jurídico. El fiscal que tomó su denuncia no pidió las medidas pertinentes para probar el delito que ella –y tres hermanas– habían sufrido y el juez Muse Chemes sobreseyó al acusado.
Informe Mariana Carbajal
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