Nuevas pistas surgieron en el último tramo del juicio de la causa Melli
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Por Alfredo Hoffman
Nuevas pistas surgieron en el último tramo del juicio de la causa Melli
 
Ver imagen Una ex enfermera del IPP aseguró que los imputados tuvieron participación en los hechos. También declaró que el mellizo varón puede ser hoy "un profesional" y dijo incluso en qué provincia viviría. Dio nombres de personas que podrían tener más datos. Otra testigo será investigada por falso testimonio.

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Fecha:21/09/2018 8:41:00 
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El juicio por la denominada causa Melli se extenderá más de lo previsto inicialmente, debido al surgimiento de nuevos datos que pueden dar lugar a pistas sobre el paradero del hijo varón de los desaparecidos Raquel Negro y Tulio Valenzuela, y que además confirman la participación de los imputados en los delitos investigados.
Un careo entre una enfermera y una de las víctimas, Sabrina Gullino Valenzuela Negro, y el pedido de investigación a otra trabajadora que habría incurrido en falso testimonio fueron los acontecimientos más importantes de la audiencia que se realizó este jueves ante el Tribunal Oral Federal de Paraná.
Miguel Torrealday, David Vainstub y Jorge Rossi están siendo juzgados por su participación en el caso de los mellizos Valenzuela Negro, que durante la dictadura fueron internados en el Instituto Privado de Pediatría (IPP), de la que fueron y son socios junto al fallecido Ángel Schroeder. Se les imputa retención y ocultamiento de menores y supresión de estado civil, es decir, robo de bebés y sustitución de identidad. Solamente la beba mujer restituyó su identidad, en 2008, mientras que el varón sigue siendo buscado.
De esta audiencia se desprendió la posibilidad de una línea de investigación del paradero del mellizo en Córdoba, con presunto involucramiento de Torrealday, y el llamado a declarar a tres testigos, dos de los cuales serán citados para el lunes.
El debate comenzó con los testimonios de las dos enfermeras que, según una pericia caligráfica, anotaron a los bebés en el ingreso al IPP en el llamado "libro de producción" o "libro de ingresos y egresos". Las dos mujeres negaron esto.
La pista de Córdoba
Cuando estaba declarando la enfermera Stella Maris Cuatrín debido a que su letra estaba en el libro del IPP, y ante una pregunta del abogado querellante Santiago Bereciartúa, admitió haber mantenido una reunión con Sabrina luego de su primera declaración en este juicio, pero negó haber dicho allí que tenía datos sobre la posibilidad de que el mellizo se encuentre en Cordóba. Esto dio lugar a un careo entre ambas.
En ese cruce ante el tribunal, Cuatrín admitió que le dijo a Sabrina que quien hoy es un hombre de 40 años puede estar viviendo en Córdoba. Ante el insistente pedido de precisiones del juez Roberto López Arango y las partes acusadoras, dijo que Torrealday y su familia tenían una casa en Córdoba en aquellos años. Agregó después, cuando Sabrina se lo recordó, que relacionó esto con algo que le dijo una médica, Amelia Niveyro, hace dos años: "A lo mejor este chico ya esté en otro lado, esté bien, sea profesional". Según dijo, la médica le habría hecho este comentario luego de preguntarle por sus declaraciones anteriores en la Justicia. Sostuvo además que Niveyro tiene relación con Vainstub.
Llamó la atención la forma en que Cuatrín miraba a Torrealday en la sala, fijamente. Esto motivó preguntas por la posibilidad de que haya sido coaccionada. "Lo miré porque él fue mi jefe", dijo contestando a López Arango, dando cuenta del sentido de autoridad todavía vigente pero negó ser presionada. Sí reconoció que en una oportunidad, en el contexto del juicio de 2011 por la causa Hospital Militar, Schroder le dijo algo así: "Qué vas a declarar Mari, en qué te estás metiendo".
La mujer aseguró que los mellizos eran atendidos por los médicos del IPP en la sala de neonatología y mencionó específicamente a Rossi, Schroeder y Torrealday. En función de la determinación de la responsabilidad de los acusados, esta frase fue contundente y esclarecedora. Además manifestó que ella no entregó al mellizo varón ni sabe nada de su destino, pero que otras enfermeras sí deben saber, y mencionó a Norma Lasbías, Miriam Guillen e Imelda Princic. Estas dos últimas no testimoniaron en este juicio oral.
Luego de un cuarto intermedio el abogado querellante Marcelo Boeykens, quien representa la querella de Sabrina, pidió que se cite a Princic, Niveyro y Guillen, en función del objetivo de avanzar en la búsqueda de la verdad que planteó su representada. El fiscal José Candioti acompañó y las defensas no se opusieron. El juez hizo lugar. Guillen debe ser ubicada en Perú, donde reside actualmente.
Falso testimonio
La audiencia se inició con las declaraciones de las ex enfermeras del IPP Marta Gómez y Stella Maris Cuatrín, ya que la pericia caligráfica determinó que ambas anotaron el ingreso de los mellizos en el libro de producción. Gómez se mantuvo en la posición de que no es su letra y que nunca realizó tales anotaciones. Argumentó que en ese momento, marzo de 1978, ya no trabajaba allí, ya que lo hizo durante 1977 hasta diciembre. Ante esto el fiscal Candioti le informó que existen registros de pago de sueldos hasta diciembre de 1978, inclusive le mostraron un libro donde figuran esos pagos pero la mujer lo siguió negando.
La abogada de la agrupación H.I.J.O.S., Sofía Uranga, preguntó si no estaría confundida en las fechas, dado que la neonatología del IPP comenzó a funcionar en octubre de 1977, por lo que era imposible que haya trabajado allí todo ese año. "No, estoy segura", respondió. La querella solicitó que se la investigue por presunto falso testimonio.
Cuatrín también negó haber escrito en el libro. "Esta no es mi letra, se lo puedo asegurar, nada que ver", dijo en contradicción con lo asegurado por el perito de Gendarmería Ricardo Herrera.
"Las Justicia es una construcción colectiva"
"Realmente, el valor del juicio oral y público es muy grande para la reconstrucción de la identidad y del pasado reciente, porque es una construcción colectiva y permite ahondar en cómo fueron los hechos que sucedieron", manifestó a UNO Sabrina Gullino Valenzuela Negro después de la audiencia.
Respecto de lo sucedido en la jornada de este jueves, señaló: "Evidentemente a las enfermeras protagonistas de los hechos, en este caso, les ha costado poder dar cuenta de todo lo que ellas vivieron".
Además Sabrina destacó la importancia de este proceso, en el marco de la investigación de los robos de bebés durante la dictadura a nivel nacional. "Es muy importante este juicio, es emblemático en el plan sistematico de apropiación de menores. Es paradigmático, en el sentido de que pudimos ir reconstruyendo desde la detención de Raquel y de Tulio, hasta el nacimiento nuestro en el Hospital Militar de Paraná y derivación al IPP. También pudimos profundizar cómo eran las relaciones de poder, las prácticas de atención y, como dijo Cuatrín, quedó más que claro que eran los médicos imputados los que participaban de la internación, de revisarnos y atendernos", subrayó.
Diario UNO.

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