Sin equipos para investigar: en dos años, la inversión en bienes de capital para ciencia se redujo 65%
Así lo alerta un informe del Grupo EPC-CIICTI. El ajuste se profundiza y hay millones de dólares obtenidos por créditos internacionales para ciencia que nadie sabe dónde están.
Fecha/Hora: 10/09/2025 07:48
Cód. 108376
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A menos de 48 horas de que venza el plazo que tiene el Gobierno nacional para vetar la Ley de Financiamiento Universitario, se siguen conociendo números de un cientificidio que no frena. Por un lado, se supo que lo que el Ejecutivo gastó del Tesoro la semana pasada para pisar el dólar equivale a todo el presupuesto de universidades. A eso se suma la desinversión en equipos: la inversión en bienes de capital y equipamiento para ciencia cayó 65,4% en términos reales desde que asumió la presidencia Javier Milei.
El impacto del ajuste que el gobierno nacional impone en el sector de ciencia y tecnología se aprecia en la continua caída de todos los ítems que componen su presupuesto. En particular, según alertó el Grupo EPC-CIICTI (Centro Iberoamericano de Investigación en Ciencia, Tecnología e Innovación), lo destinado a insumos y equipos: «Sin equipamiento, los investigadores y las áreas de apoyo técnico ven seriamente comprometidas las posibilidades de desarrollar sus actividades».
A su vez, además de la desinversión en equipos que marca el CIICTI, en los meses transcurridos de 2025 se profundizó el escenario de ajuste en todos los organismos del Sistema Nacional de Ciencia, Tecnología e Innovación. La Secretaría de Innovación, Ciencia y Tecnología y la Agencia IDI lideraron la caída, mientras se consolidó una retracción que está entre el 35% y el 45% desde 2023 para la mayoría de los organismos.
Por último, el informe del Grupo EPC-CIICTI advierte sobre el escenario del presupuesto de la Secretaría de Educación, que culminó el 2024 con una caída real de la inversión del 41,8% y que para el 2025 espera un deterioro adicional del 10,3%.
En el caso de las universidades nacionales, principal programa presupuestario de la Secretaría, la caída fue del 21,9% en 2024 y proyectan perder 8,6% adicionales en 2025.
Millones de créditos internacionales para ciencia que nadie sabe dónde están
Mientras el cientificidio avanza, un interrogante permanece abierto en el sector de la ciencia y la técnica: ¿qué pasó con los fondos internacionales que recibió el Ejecutivo para uso exclusivo del sistema científico? Se trata nada menos que de 53 millones de dólares.
El monto salió a la luz a fines del año pasado, a partir de una investigación periodística. Se probó que esos millones habían sido transferidos a la Argentina y que estaban destinados al financiamiento de Becas y Proyectos a través de la Agencia Nacional de Promoción de la Investigación, el Desarrollo Tecnológico y la Innovación. Provenían del Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE) y del Banco Mundial a través del BIRF. A partir de una demanda de la comunidad científica, la Justicia le reclamó al Estado que diga dónde está esa plata, pero el Ejecutivo apeló.
“En el Informe 142 presentado ante el Congreso por el Jefe de Gabinete, Guillermo Francos, se incorporaron varias respuestas a preguntas que logramos introducir. Basándonos en las respuestas N°166, N°476-478 y Nº1560, estimamos que el Gobierno cuenta con 46 millones de dólares para la inversión en Ciencia, y que incluso podría acceder a otros 196 millones ya asignados. Ese dinero, sin embargo, nunca llegó a nuestros laboratorios ni estipendios. Curiosamente, la parálisis de los PICT convive con el hecho de que el 80% de su presupuesto proviene de esos fondos”, denunció el colectivo Becarixs de Agencia.
Entre pedidos de informes y denuncias
El informe difundido desde ese espacio advierte que, pese a la subejecución de esos fondos, la Agencia recibió una nueva partida presupuestaria en Junio. Pero no se financiaron nuevos proyectos y las becas siguen congeladas.
“Las sospechas de irregularidades en el uso de estos fondos motivó a Becarixs Agencia a presentar tres proyectos en estado parlamentario para la comunicación y acceso a la información sobre el tema. También nos presentamos en comisión ante el Senado de la Nación, en Audiencia Pública ante la Cámara de Diputados, y acompañamos presentaciones ante la Justicia denunciando la situación”, detallaron desde el colectivo.
El impacto del ajuste que el gobierno nacional impone en el sector de ciencia y tecnología se aprecia en la continua caída de todos los ítems que componen su presupuesto. En particular, según alertó el Grupo EPC-CIICTI (Centro Iberoamericano de Investigación en Ciencia, Tecnología e Innovación), lo destinado a insumos y equipos: «Sin equipamiento, los investigadores y las áreas de apoyo técnico ven seriamente comprometidas las posibilidades de desarrollar sus actividades».
A su vez, además de la desinversión en equipos que marca el CIICTI, en los meses transcurridos de 2025 se profundizó el escenario de ajuste en todos los organismos del Sistema Nacional de Ciencia, Tecnología e Innovación. La Secretaría de Innovación, Ciencia y Tecnología y la Agencia IDI lideraron la caída, mientras se consolidó una retracción que está entre el 35% y el 45% desde 2023 para la mayoría de los organismos.
Por último, el informe del Grupo EPC-CIICTI advierte sobre el escenario del presupuesto de la Secretaría de Educación, que culminó el 2024 con una caída real de la inversión del 41,8% y que para el 2025 espera un deterioro adicional del 10,3%.
En el caso de las universidades nacionales, principal programa presupuestario de la Secretaría, la caída fue del 21,9% en 2024 y proyectan perder 8,6% adicionales en 2025.
Millones de créditos internacionales para ciencia que nadie sabe dónde están
Mientras el cientificidio avanza, un interrogante permanece abierto en el sector de la ciencia y la técnica: ¿qué pasó con los fondos internacionales que recibió el Ejecutivo para uso exclusivo del sistema científico? Se trata nada menos que de 53 millones de dólares.
El monto salió a la luz a fines del año pasado, a partir de una investigación periodística. Se probó que esos millones habían sido transferidos a la Argentina y que estaban destinados al financiamiento de Becas y Proyectos a través de la Agencia Nacional de Promoción de la Investigación, el Desarrollo Tecnológico y la Innovación. Provenían del Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE) y del Banco Mundial a través del BIRF. A partir de una demanda de la comunidad científica, la Justicia le reclamó al Estado que diga dónde está esa plata, pero el Ejecutivo apeló.
“En el Informe 142 presentado ante el Congreso por el Jefe de Gabinete, Guillermo Francos, se incorporaron varias respuestas a preguntas que logramos introducir. Basándonos en las respuestas N°166, N°476-478 y Nº1560, estimamos que el Gobierno cuenta con 46 millones de dólares para la inversión en Ciencia, y que incluso podría acceder a otros 196 millones ya asignados. Ese dinero, sin embargo, nunca llegó a nuestros laboratorios ni estipendios. Curiosamente, la parálisis de los PICT convive con el hecho de que el 80% de su presupuesto proviene de esos fondos”, denunció el colectivo Becarixs de Agencia.
Entre pedidos de informes y denuncias
El informe difundido desde ese espacio advierte que, pese a la subejecución de esos fondos, la Agencia recibió una nueva partida presupuestaria en Junio. Pero no se financiaron nuevos proyectos y las becas siguen congeladas.
“Las sospechas de irregularidades en el uso de estos fondos motivó a Becarixs Agencia a presentar tres proyectos en estado parlamentario para la comunicación y acceso a la información sobre el tema. También nos presentamos en comisión ante el Senado de la Nación, en Audiencia Pública ante la Cámara de Diputados, y acompañamos presentaciones ante la Justicia denunciando la situación”, detallaron desde el colectivo.