El voto obrero que castigó a Milei en la provincia

La política de ajuste del gobierno nacional tuvo en las fábricas su contracara electoral. El repaso de los conflictos y despidos en plantas, y de cómo se votó en esos distritos.

Fecha/Hora: 15/09/2025 08:25 Cód. 108416 Tiempo de lectura: 7.52 minutos.
“Los resultados que definieron la elección en el territorio bonaerense no nos sorprenden porque lógicamente a los trabajadores les llegó el agua al cuello. Y si no es al cuello, casi a la boca. Este es el fracaso de un gobierno nacional que ya no da para más. Realmente no da para más con la postura que tiene”. Las palabras de Carlos Varela, secretario general del gremio en Cerámicos Ilva de Pilar resumen el pulso de las elecciones legislativas bonaerenses del domingo 7 de septiembre, donde Fuerza Patria se impuso con una diferencia superior a los 13 puntos en 6 de las 8 secciones electorales frente a La Libertad Avanza. El mapa del voto tuvo un componente central que fue la crisis industrial, los despidos y el congelamiento salarial bajo el gobierno de Javier Milei, según lo expresan dirigentes gremiales y delegados de diferentes plantas del entramado productivo provincial.

A lo largo del año, Buenos Aires/12 dio cuenta de cada uno de los casos, englobados dentro de un contexto de crisis industrial que ya se cargó a más de 7.500 pymes bonaerenses y 16.000 a nivel país, según los datos oficiales del gobierno provincial.

En el Parque Industrial de Pilar, donde a principios de este mes Ilva paralizó su producción dejando a 300 familias sin certezas, el voto se codificó en un mensaje. Allí, Fuerza Patria alcanzó 107.044 votos (59,72 por ciento), contra 55.821 (31,14 por ciento) de La Libertad Avanza, y también ganó la Primera Sección Electoral por 10 puntos, pese a las encuestas previas que señalaban lo contrario. Mientras esperan que se termine la conciliación obligatoria, Varela vincula directamente el resultado con la política económica nacional, ya que la mayoría de los trabajadores son pilarenses.

“En el último año y medio hubo muchísimas industrias cerradas, despidos en la calle. En el Parque Industrial de Pilar tenemos cuatro empresas que cerraron sus puertas. Yo creo que ese fue uno de los castigos que ha recibido este gobierno actual por la forma en que se ha venido sosteniendo y manejando. Milei gobierna y gobernó para los más poderosos, para los más ricos. Y ha sometido a toda la clase obrera. Al final la casta era la clase obrera”, profundiza Varela.

Dentro de la Primera Sección, el conflicto en la planta de Georgalos en Victoria, partido de San Fernando, se volvió otro caso testigo. El despido de cinco trabajadores en junio pasado con acusaciones de “sabotaje” durante una huelga, derivó en un acampe que lleva más de tres meses. Tras el fallo judicial de este miércoles 10 de septiembre que ordenó reincorporar a dos de los cinco cesanteados, Maximiliano Montero, uno de los empleados que podrá volver a la fábrica, explica que el resultado electoral se transformó en alegría.

“Seguimos con la pelea. Lo que noto en los compañeros es una alegría porque perdió Milei, lo toman así, porque padecieron el achicamiento del salario, el tema de los despidos como fue nuestro caso y la baja de producción. Vi muchos estados de compañeros festejando eso porque muchos de ellos son del distrito y decidieron votar a Fuerza Patria o a la Izquierda”, comenta. En San Fernando, la alianza peronista obtuvo 46.979 votos (55,66 por ciento), mientras que La Libertad Avanza cosechó 26.742 (31,68 por ciento). Montero destaca que incluso sectores desencantados con el peronismo encontraron en la figura de Axel Kicillof un punto de referencia: “Con todo lo que pasó hay compañeros que le están dando una chance al gobernador Kicillof”.

En Cerámica Cortines, en Luján, más de 300 trabajadores enfrentaron suspensiones y recortes salariales desde comienzos de año que estallaron en mayo. El impacto allí también se tradujo en las urnas donde Fuerza Patria ganó con el 51,62 por ciento (29.354 votos) contra 36,89 por ciento (20.977 votos) de La Libertad Avanza. Parte del voto en este distrito, que también es de la Primera Sección, estuvo marcado por el rechazo a la flexibilización laboral y el descontento con los pagos fragmentados de salarios, como relataban los delegados en medio de las audiencias en el Ministerio de Trabajo.

La Tercera Sección, donde Fuerza Patria sacó la mayor diferencia
El caso de la Gráfica Morvillo, con más de 250 despidos tras más de 6 meses de su cierre definitivo, se convirtió en un símbolo de resistencia en Avellaneda, donde los trabajadores permanecen como cuidadores del inmueble. La respuesta electoral fue categórica. Verónica Magario, candidata de Fuerza Patria, arrasó con el 62 por ciento, frente al 27,4 por ciento de La Libertad Avanza. Los testimonios de los trabajadores de Morvillo en estos meses fueron constantes: “Sostenemos la planta mientras ellos no aparecen”. Ese sostenimiento se tradujo en una expresión política contra el gobierno nacional, según manifiestan los propios trabajadores.

En Molinos Río de la Plata, en Esteban Echeverría, el conflicto estalló en junio con diez despidos y la amenaza permanente de otros 25. Luciano Greco, delegado de la comisión interna, relaciona el voto con la resistencia sindical:

“Acá el voto fue por amplísima mayoría hacia Fuerza Patria. El porcentaje minoritario que había votado a Milei en 2023 hoy está arrepentido, viendo que la situación con el gobierno nacional no solo que no mejoró ni se quedó en como estábamos, sino que empeoró. Todo lo que tiene que ver con los planes de más despido y la reducción de todos los adicionales de convenios se vino y se viene frenando”. Fuerza Patria ganó en ese distrito con 77.729 votos (50,43 por ciento) contra 45.201 (29,33 por ciento) de La Libertad Avanza.

Greco resaltó la centralidad de haber negociado una cláusula de no despidos por 18 meses en la planta: “Para nosotros sería fundamental contar con esa cláusula. Esta semana esperamos poder avanzar con eso en el borrador para la próxima audiencia del 15 de septiembre”.

La planta de Dánica con décadas de presencia en Llavallol, cerrada en diciembre de 2024 con 150 despidos y reabierta tras la asistencia provincial a fines de enero de este año, fue uno de los ejes de campaña a nivel local además de la obra pública. En Lomas de Zamora, Fuerza Patria obtuvo 198.091 votos (56,09%), frente a 97.61 (27,68%) de La Libertad Avanza. El contraste entre la reapertura con ayuda bonaerense y el cierre bajo Milei marcó la diferencia.

La fábrica de caramelos Lipo, con más de 50 años en Lanús, fue otra de las golpeadas por las políticas recesivas de Milei. El conflicto estalló en mayo, cuando los trabajadores denunciaron el abandono empresarial tras el anuncio de paralización, y resurgió con fuerza a fines de agosto. “Es intolerable por donde lo veas. Estamos siendo aplastados por las deudas y las necesidades básicas. Seguimos exigiendo que se nos pague”, dijo Damián Polo, de la comisión interna, a Buenos Aires/12 hace unos días atrás. La crisis derivó en acampes y protestas, tras lo cual la empresa acordó pagar parcialmente los salarios adeudados. Sin embargo, persiste la incertidumbre, julio se paga en cuotas y agosto sigue impago. La respuesta del arco industrial local se reflejó en las legislativas, según argumentan los trabajadores. Allí, el peronismo que logró recuperar el municipio en 2023, ganó en Lanús con el 49,51 por ciento, frente al 32,07 por ciento de La Libertad Avanza y el PRO.

En la Séptima, una excepción ajustada
En Olavarría, capital cementera y ceramista, el voto mostró una diferencia estrecha pese a los despidos en Cerro Negro (37 y 12 retiros voluntarios), Loma Negra (cerca de 100) y FABI (150). Fuerza Patria se impuso con el 39,41 por ciento (22.120 votos) contra 37,11 por ciento (20.830 votos) de La Libertad Avanza.

Gustavo Bustamante, secretario general de SOECO, dice que los resultados lo sorprendieron. “Nosotros en realidad creíamos que en Olavarría la diferencia iba a ser mucho más grande. Fue solamente por dos o tres puntos nada más. Parece que los olavarrienses todavía no nos hemos dado cuenta del desastre que hizo este gobierno de Milei a la industria local. Me desilusionó un poco, porque yo creía que la diferencia iba a ser mayor.”

Bustamante identifica un núcleo duro de votantes de Milei que permanece inmutable: “Por más que este tipo redoble las apuestas y que nosotros sigamos pasando lo que estamos pasando en la cerámica, no les cambia la forma de pensar. De todas maneras, la mayor parte de los trabajadores de la cerámica no eligieron las boletas violetas, por eso se ganó también”.

Un voto pensado desde el bolsillo vacío
La lectura común de todos los testimonios gremiales es que el voto bonaerense no se trató de una disputa política y de medir fuerzas de militancia. Según sus relatos las urnas mostraron que fue un castigo al ajuste, la parálisis industrial y el congelamiento salarial reflejado en una estabilización “virtual” de la inflación, debido a que los trabajadores no llegan a fin de mes. "Cuando perdés por más de 13 puntos significa que la gente no la está pasando bien y ya la visión política queda en un segundo plano", completan. Desde los ceramistas de Pilar y Olavarría hasta los molineros de Esteban Echeverría, pasando por gráficos y alimenticios, los trabajadores trasladaron a las urnas la experiencia directa de suspensiones, despidos y cierres de plantas. Carlos Varela lo sintetiza sin pelos en la lengua: “No sumó un milímetro de base electoral y lo movieron a él directamente. Milei va a tener que cambiar su política económica”.