El guiño al agro tiene un costo fiscal similar a la ley para discapacidad
El campo ahorrará unos USD1.500 M en impuestos si liquida los USD7.000 M que espera el Gobierno. El número equivale al 0,25% del PBI, cifra similar a los entre 0,25% y 0,45% que, según la OPC, cuesta al fisco la emergencia en discapacidad, hoy suspendida por el Gobierno. Advierten por su posible impacto de corto plazo en la inflación
Fecha/Hora: 23/09/2025 08:07
Cód. 108508
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El Gobierno pateó el tablero con una baja de retenciones al 0% para todos los granos y oleaginosas, más carnes avícolas y bovinas, hasta las elecciones. A la búsqueda de conseguir algo de oferta de divisas en un contexto de una demanda desbocada que obligó a que el BCRA vendiera más USD1.100 M en tres días, el anuncio fue realizado en medio de la contienda legislativa entre oposición y oficialismo por el ajuste fiscal y las iniciativas de generar un mayor gasto que fueron vetadas. El impacto fiscal de la medida equivale, de máxima, al 0,25% del PBI, costo similar al de la suspendida emergencia en discapacidad
El vocero presidencial, Manuel Adorni, publicó en su cuenta de X, bien temprano y en la previa tanto al apoyo del Tesoro de los EE.UU. como a la apertura del mercado cambiario: “Con el objetivo de generar mayor oferta de dólares durante este período, hasta el 31 de octubre habrá retenciones cero para todos los granos”. El anuncio fue convalidado en el Boletín Oficial: las retenciones fueron al 0% para esos sectores hasta el 31 de octubre, exactamente cincos días después de las elecciones legislativas, o hasta que se llegue a declaraciones juradas de exportación del agro por USD7.000 millones.
Un informe del Iaraf estimó que el impacto fiscal directo, es decir el dinero que se pierde de recaudar el fisco por no cobrarle retenciones a una exportación de granos y oleaginosas por USD7.000 M ronda entre el 0,25% y el 0,28% del PBI (alrededor de USD1.500 M), dependiendo de cuánto de ese total se explica por ventas externas de maíz y cuánto por la soja. Por otro lado, un dato matiza ese número, ya que habrá un efecto indirecto, que sumará recaudación para el fisco, por la vía de una mayor base imponible de Ganancias. Tomando eso en cuenta, para el Iaraf el costo fiscal final será de entre 0,23% y 0,26% del PBI. Vale destacar que el costo por retenciones se sufre en 2025 y el beneficio por Ganancias se goza en 2026.
Otro matiz apuntado por el Iaraf es que en realidad el Presupuesto 2026 dio señales de que el Gobierno esperaba exportar menos que USD7.000 M de acá a fin de año, es decir que esperaba que, dado el relativo atraso cambiario, el agro soltara menos de lo que se guardó tras la liquidación del primer semestre, por lo cual el impacto fiscal sería, respecto a esas expectativas, del 0,14% del PBI. Coincidió con ese número la consultora Equilibra, que señaló como cifra un 0,15% del PBI.
Como referencia, el Gobierno promulgó hoy la Ley de Emergencia en Discapacidad, que inicialmente vetó y luego el Congreso volvió a imponer. En cambio, suspendió su ejecución hasta que el Congreso indique cuál será el origen de los fondos para aplicarla. Según la Oficina de Presupuesto del Congreso (OPC), el costo fiscal de la iniciativa en discapacidad estaba entre el 0,25% y el 0,48% del PBI, un número no demasiado lejano del impacto que tendrá la baja de retenciones, cuyo costo se acerca también al superávit fiscal logrado en lo que va del año: un 0,4% del PBI
El director ejecutivo de Equilibra, Martín Rapetti, señaló: “Probables efectos de la baja transitoria de la retenciones 1) Mayor oferta de dólares ahora, menor después de las elecciones; ergo, menor tipo de cambio hoy (o menor perdida de reservas del BCRA) y mayor tipo de cambio post elecciones. 2) Menor recaudación en 2025; ergo mayor deficit fiscal primario o mayor ajuste del gasto en lo que resta del año. 3) mayor precio en pesos de los productos sin retenciones; ergo probable aceleración transitoria de la inflación durante los próximos meses”.
En la misma línea, el economista Emmanuel Álvarez Agis dijo: “Que un presidente que dice que no hay plata y corta los recursos para los discapacitados baje las retenciones para generar un poquito de oferta de dólares hstas la elección es una cosa obscena. La medida es ultra-agresiva, mostrando lo grave de la situación en el MLC, pero también apostando a generar un incentivo máximo para adelantar la cosecha fina. La cuenta para el exportador no es obvia. La decisión de vender depende de pensar que el precio actual (tipo de cambio hoy x precio internacional) es mayor que el precio futuro (tipo de cambio futuro x precio futuro - retenciones), es decir, la pregunta es si la baja de retenciones (27% para la soja o 10% para el trigo) supera la expectativa de devaluación pos elecciones”.
El economista de Outlier Gabriel Caamaño Gómez coincidió en que la medida debilita la idea de que “no hay plata” y además remarcó que sobre el final del primer semestre la mayor oferta de dólares del agro también alimentó a la demanda de divisas del mismo sector, por la salida del cepo: “Otra baja transitoria de retenciones para favorecer la oferta de granos. Esta mucho más generosa que la anterior. Tiene costo fiscal, debilitando argumentos del Gobierno. Y ojo que el mercado de cambios no funciona igual con y sin cepo. Ya lo vimos en junio y julio”.
El vocero presidencial, Manuel Adorni, publicó en su cuenta de X, bien temprano y en la previa tanto al apoyo del Tesoro de los EE.UU. como a la apertura del mercado cambiario: “Con el objetivo de generar mayor oferta de dólares durante este período, hasta el 31 de octubre habrá retenciones cero para todos los granos”. El anuncio fue convalidado en el Boletín Oficial: las retenciones fueron al 0% para esos sectores hasta el 31 de octubre, exactamente cincos días después de las elecciones legislativas, o hasta que se llegue a declaraciones juradas de exportación del agro por USD7.000 millones.
Un informe del Iaraf estimó que el impacto fiscal directo, es decir el dinero que se pierde de recaudar el fisco por no cobrarle retenciones a una exportación de granos y oleaginosas por USD7.000 M ronda entre el 0,25% y el 0,28% del PBI (alrededor de USD1.500 M), dependiendo de cuánto de ese total se explica por ventas externas de maíz y cuánto por la soja. Por otro lado, un dato matiza ese número, ya que habrá un efecto indirecto, que sumará recaudación para el fisco, por la vía de una mayor base imponible de Ganancias. Tomando eso en cuenta, para el Iaraf el costo fiscal final será de entre 0,23% y 0,26% del PBI. Vale destacar que el costo por retenciones se sufre en 2025 y el beneficio por Ganancias se goza en 2026.
Otro matiz apuntado por el Iaraf es que en realidad el Presupuesto 2026 dio señales de que el Gobierno esperaba exportar menos que USD7.000 M de acá a fin de año, es decir que esperaba que, dado el relativo atraso cambiario, el agro soltara menos de lo que se guardó tras la liquidación del primer semestre, por lo cual el impacto fiscal sería, respecto a esas expectativas, del 0,14% del PBI. Coincidió con ese número la consultora Equilibra, que señaló como cifra un 0,15% del PBI.
Como referencia, el Gobierno promulgó hoy la Ley de Emergencia en Discapacidad, que inicialmente vetó y luego el Congreso volvió a imponer. En cambio, suspendió su ejecución hasta que el Congreso indique cuál será el origen de los fondos para aplicarla. Según la Oficina de Presupuesto del Congreso (OPC), el costo fiscal de la iniciativa en discapacidad estaba entre el 0,25% y el 0,48% del PBI, un número no demasiado lejano del impacto que tendrá la baja de retenciones, cuyo costo se acerca también al superávit fiscal logrado en lo que va del año: un 0,4% del PBI
El director ejecutivo de Equilibra, Martín Rapetti, señaló: “Probables efectos de la baja transitoria de la retenciones 1) Mayor oferta de dólares ahora, menor después de las elecciones; ergo, menor tipo de cambio hoy (o menor perdida de reservas del BCRA) y mayor tipo de cambio post elecciones. 2) Menor recaudación en 2025; ergo mayor deficit fiscal primario o mayor ajuste del gasto en lo que resta del año. 3) mayor precio en pesos de los productos sin retenciones; ergo probable aceleración transitoria de la inflación durante los próximos meses”.
En la misma línea, el economista Emmanuel Álvarez Agis dijo: “Que un presidente que dice que no hay plata y corta los recursos para los discapacitados baje las retenciones para generar un poquito de oferta de dólares hstas la elección es una cosa obscena. La medida es ultra-agresiva, mostrando lo grave de la situación en el MLC, pero también apostando a generar un incentivo máximo para adelantar la cosecha fina. La cuenta para el exportador no es obvia. La decisión de vender depende de pensar que el precio actual (tipo de cambio hoy x precio internacional) es mayor que el precio futuro (tipo de cambio futuro x precio futuro - retenciones), es decir, la pregunta es si la baja de retenciones (27% para la soja o 10% para el trigo) supera la expectativa de devaluación pos elecciones”.
El economista de Outlier Gabriel Caamaño Gómez coincidió en que la medida debilita la idea de que “no hay plata” y además remarcó que sobre el final del primer semestre la mayor oferta de dólares del agro también alimentó a la demanda de divisas del mismo sector, por la salida del cepo: “Otra baja transitoria de retenciones para favorecer la oferta de granos. Esta mucho más generosa que la anterior. Tiene costo fiscal, debilitando argumentos del Gobierno. Y ojo que el mercado de cambios no funciona igual con y sin cepo. Ya lo vimos en junio y julio”.