Nacionales: El giro del Banco Central

Bandas por inflación y reservas

El cambio en las bandas cambiarias y el plan de acumulación de reservas desde 2026 fueron leídos como una señal al mercado y al FMI, con impacto inmediato en bonos y riesgo país

Fecha/Hora: 16/12/2025 08:42 Cód. 109419 Tiempo de lectura: 3.39 minutos.
El anuncio del Banco Central sobre el nuevo esquema de bandas cambiarias y el compromiso de acumular reservas activó una lectura inmediata entre analistas y operadores. La decisión, que comenzará a regir desde enero de 2026, buscó corregir desajustes del programa monetario y enviar señales tanto al mercado como al Fondo Monetario Internacional ( FMI).

Desde el equipo de Research de PUENTE afirmaron que la comunicación oficial se concentró en dos medidas centrales: el ajuste de las bandas por inflación y la puesta en marcha de un programa de acumulación de reservas. Según señalaron, ambos puntos respondieron a demandas explícitas del mercado.

El giro en las bandas y el fin del ajuste fijo
PUENTE destacó que el cambio más visible fue el reemplazo del deslizamiento del 1% mensual por un ajuste de las bandas en función de la inflación. “En el primer caso, las bandas pasan de ajustarse al 1% a hacerlo por inflación”, señalaron. Con una inflación mensual del 2,5% en noviembre, el nuevo esquema implicará un corrimiento más rápido del piso y el techo del dólar.

El propio Banco Central precisó que “a partir del 1 de enero de 2026, el techo y el piso de la banda de flotación cambiaria evolucionarán cada mes al ritmo correspondiente al último dato de inflación mensual informado por INDEC”.

En ese marco, en el mercado interpretaron que la aplicación de ese criterio llevará el techo de la banda a la zona de los $1.556 desde enero, una cifra que surge de trasladar el último dato de inflación al esquema anunciado por el BCRA, aunque sin un cálculo detallado explicitado por la autoridad monetaria.

Analistas coincidieron en que mantener una depreciación del 1% mensual resultaba insostenible con un nivel de inflación más elevado. El nuevo esquema, señalaron, permitirá que la cotización se acomode dentro de la banda sin obligar al Banco Central a intervenir con ventas de reservas.

Reservas, remonetización y demandas del mercado
El segundo eje del anuncio fue el compromiso de acumular reservas para acompañar la remonetización de la economía. Para PUENTE, el Banco Central “apunta a satisfacer la remonetización de la economía mediante la acumulación de reservas, que podría llegar a USD 10 mil millones”.

La autoridad monetaria amplió esa referencia y estimó compras por entre USD 10.000 millones y USD 17.000 millones, en la medida en que la demanda de dinero muestre un crecimiento consistente desde los próximos meses.

De todos modos, desde PUENTE advirtieron que la acumulación de reservas no será automática. Por diseño, el programa estará condicionado por el volumen de operaciones en el mercado de cambios, el aumento efectivo de la demanda de dinero y el nivel de las bandas cambiarias, factores que dependerán del ritmo de normalización del esquema cambiario.

Señales al FMI y reacción financiera
El trasfondo externo ocupó un lugar central en la lectura del mercado. La Argentina necesita que el riesgo país descienda hacia la zona de los 300 puntos —desde los 620 actuales— para acceder nuevamente al financiamiento internacional a tasas razonables y despejar dudas sobre el cumplimiento de los pagos de deuda. En el corto plazo, enfrenta vencimientos por USD 3.000 millones en enero y otros USD 4.500 millones en julio.

PUENTE calificó el anuncio como “sumamente positivo” porque atendió tres puntos críticos del programa económico: la cercanía del tipo de cambio a la banda superior, el bajo nivel de reservas internacionales y el desvío respecto de la meta acordada con el FMI. “La acumulación de reservas era el factor más demandado por el mercado”, subrayaron.

La primera reacción acompañó esa lectura. Los títulos públicos registraron subas tras el anuncio y, de sostenerse esa tendencia, analistas estimaron que el riesgo país podría iniciar un sendero descendente. En paralelo, el equipo económico buscó enviar una señal al Fondo, que venía cuestionando la falta de acumulación de reservas, mientras el ingreso estacional de divisas por exportaciones agrícolas aparece como una de las claves para reforzar el balance del Banco Central sin presionar el mercado cambiario.